Hoy nos aventuramos con un nuevo
viaje para seguir trabajando la decena. Y lo hacemos con un nuevo material:
"El autobús decena".
Seguro que ya es conocido por todos vosotros, pero os pueden ayudar las
cositas nuevas que le he incorporado. Aquí tenéis unas fotos de todo el
material que lo compone.
Ahora os quiero contar cómo lo he puesto
en funcionamiento. Todo estaba guardado en bolsas (ellos no veían nada) y poco
a poco les fui presentando partes del material.
*Lo primero que saqué fueron las cajas de
plástico transparentes sin la tapa y les pregunté:
-¿Qué es esto?
-Cajas para guardar cosas.
Respondieron muchos.
-Bien, seguimos.
*En segundo lugar saqué las tapas de las
cajas, las rojas y las azules y les planteé la misma pregunta. Aquí salieron
muchas respuestas.
-Para tapar.
-Ahora saldrán las rosas, y las
verdes, y las amarillas.
-Pero, ¿por qué tendrán ese
color?
-No sé. Decían.
Les di una pista: -Mirad los tarritos de
miel de las abejas de nuestro calendario.
Rápidamente, Claudia C. dijo: -Ya lo sé;
las rojas son de las decenas y las azules de las cositas sueltas.
*Terminé poniendo en las tapas rojas gomas
de color rojo y en las azules palillos.
Después de esta presentación nos fuimos a
la alfombra, saqué el siguiente material y esto es lo que ocurrió.
La imagen del autobús la conseguí en la
página de depositfhotos y la de los niños y el coche en imágines para colorear
en google. Estas son.
Amplié el autobús a tamaño A3, lo
calqué en cartulina y lo coloreé con rotuladores permanentes de color rojo. Los
niños, de igual modo, hasta calcular el tamaño que ocupan en las ventanas.
Seguí el mismo proceso con los coches.
Ya que habíamos trabajado en gran grupo,
nos tocaba trabajar en pequeño grupo, aunque como era el primer día, todos
quisimos ver cómo seguía el juego. Para esta parte, reduje un poco el autobús
tamaño A3 e hice fotocopias en color. Esto me ha quitado mucho trabajo y el
resultado está muy bien. Recorté los nuevos autobuses, los plastifiqué, calé
las ventanas y los pegué en corcho blanco. Después los enmarqué con cinta
americana y les puse un poquito de fieltro para que no resbalen los palillos
con los que trabajaremos.
Quiero darle las gracias desde aquí a
nuestro querido amigo Antonio Correro que ha estado pendiente de que no nos
faltara ni un corcho y nos los ha facilitado con muchísimo cariño, sin
olvidarnos, de nuevo, de la generosidad de nuestras familias con su ayuda
económica para los materiales.
Una vez que ya os he explicado cómo están
hechos, quiero que veáis a los peques de 3 añitos en acción. Controlaron
perfectamente los viajeros de sus autobuses.
Finalmente, nos tocaba la parte en la que
ya no había guía de ventanas ni de espacios que nos facilitaran que no nos
equivocábamos al contar 10 cositas para formar la decena. ¿Serían capaces de
hacerlo solos y demostrar lo que habían aprendido? Aquí tenéis la respuesta.
¡Qué grandes son estos pequeños! Otro día
más que terminé la jornada con una sonrisa de oreja a oreja. Me quito el
sombrero con estos "Peque-Einsteins".
Hoy sólo puedo deciros que es un placer
compartir esto con vosotros. Espero que lo disfrutéis y que os entre el
gusanillo de vivir esta experiencia que yo he disfrutado. Un material muy
laborioso, pero un resultado que hace olvidar cualquier cansancio. Besetes.
Una estupenda idea para trabajar las decenas y los dibujos son chulísimos.Un saludo
ResponderEliminarGracias Yolanda. Siempre estás ahí dándonos apoyo. No sé si te llegan mis comentarios. Hay muchos que no veo. Por eso aprovecho para darte muchísimas gracias por todo lo que compartes con nosotros. Sigue así, es un placer. Yo, por mi parte, seguiré currando también para compartir con todos vosotros. Saludos.
ResponderEliminarHola!muy buena idea. Nos también estamos con la decena. Quizás le cuesta la palabra en si. Concepto más o menos interiorizado:).
ResponderEliminarMuy chulo el bus y coches. Nos andamos con palos de colores.
Buen finde. Un saludo.
Muchas gracias. Yo me quedo con el conteo y con la idea de que cuando tienen diez cositas, tienen una decena. No sé si realmente lo han interiorizado, pero sí lo aplican cuando les planteo cuestiones. La verdad es que estoy flipando con estos pequeñines. Son fantásticos.
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