Hoy os presento un nuevo juego para
trabajar ABN. Viene de la mano de un personaje muy peculiar: "LA PRINCESA
VANESA"
En primer lugar, quiero contaros cómo lo
he elaborado. Encontré esta imagen en Internet que me encantó, la imprimí, la
amplié a tamaño A3, la calqué en la ventana sobre cartulina de color carne y la
decoré con papeles de motivos diversos haciéndole el vestido, los zapatos y los
lazos de las coletas.
Por otra parte, calqué la corona en papel plateado y la
decoré con gomets de estrellas. La princesa está dividida en 3 partes, lo que
me permite poder plastificarla en una plastificadora de tamaño A3 y los brazos
se me quedan libres para ponerlos encima de la regla que sujetará.
El siguiente paso es pintar con pintura de
color dorado en spray. He elegido una regla transparente de 50 cm. Después de
pintarla, le he pegado 10 perchas equidistantes entre sí y he realizado
distintos círculos en los que indicaremos qué vamos a trabajar.
Concretamente tenemos: Números del 1 al 10
para trabajar secuencia numérica ascendente y descendente, colores, formas
geométricas y, como ellos lo llaman "el tachado" (si está tachado no
es... círculo, cuadrado, etc.). También he hecho un bloque de vocales.
Buscaremos distintos dibujos que empiecen por estas letras y los pegaremos en
un collar. Estamos eligiendo las imágenes que más nos gustan. Todo esto lo
guardamos en una preciosa cajita y aquí tenemos el resultado.
Ahora os quiero contar cómo les he
presentado el juego. Sabéis que me gusta mucho explicárselo a través de un
cuento y éste es el que les he contado sobre La princesa Vanesa
.
"Había una vez una princesa
muy juguetona y alocada. Siempre estaba jugando, riendo y no paraba ni un
segundo. Se llamaba Vanesa. Tenía cara de pícara y, la verdad, es que era un
trasto. Su mamá, la reina, hablaba mucho con ella y le enseñaba que debía tranquilizarse,
porque cualquier día, ocurriría algo de lo que se arrepentiría. Y no tardó
mucho en llegar.
Vanesa, tenía muchísimos juguetes. Su mamá
y su papá siempre le decían que podía jugar con todos si los cuidaba y los
recogía, pero que había una cosa que, aunque parecía un juguete, no lo era. Se
trataba de un gran cofre donde estaban guardadas las joyas de su mamá, de su
abuela, de sus tías... Eran de gran valor y estaba totalmente prohibido jugar
con ellas.
Pero la curiosidad de Vanesa era
grandísima y un día no pudo resistir la tentación de abrirlo. A pesar de saber
que estaba desobedeciendo a sus padres, estaba dispuesta a averiguar qué
guardaba en su interior.
Cuando ya casi lo tenía abierto, se le
escurrió de las manos y se le cayó al suelo, con tan mala suerte que se abrió y
todas las joyas que había dentro se rompieron. Todos los collares se desarmaron
y había perlas por toda la habitación. Vanesa comenzó a llorar muy arrepentida
y recordó los consejos que sus padres siempre le daban. Ya había fallado en
uno, pero sabía que había otro muy importante: Decir siempre la verdad.
Así que, a pesar de que sabía que le
esperaba una buena regañina, Vanesa, se lo contó a sus papás y la premiaron por
haber sido tan valiente. Nos encanta que nos hayas contado la verdad, así
podremos solucionar el problema. Pero prométenos que no lo volverás a hacer
nunca jamás. Entonces, el rey y la reina tuvieron una idea y le dijeron a
Vanesa:
-Nosotros te ayudaremos a arreglar este
desastre. Vamos a buscar a los niños y niñas más listos del reino para que nos
ayuden a formar los collares que se han desarmado. Pensaremos cómo eran y se lo
contaremos. Seguro que entre todos lo conseguiremos.
¿Sabéis quiénes son esos sabios que
arreglarán los collares? Nosotros.
¿Creéis que seremos capaces de ayudar a
Vanesa? Tenemos que intentarlo, así sus padres la perdonarán y ella volverá a
ser la princesa alegre y juguetona que siempre ha sido.
Pues, venga, "manos a la obra".
En este momento les presenté la caja. En
cada círculo están las indicaciones que han pensado Vanesa y sus papás. Así
eran los collares: tenían .... perlas, eran de color..., tenía forma de .....
Estaban impacientes y rápidamente empezaron a jugar.
*Han formado collares contando perlas:
tenían que completar la secuencia numérica del 1 al 10.
Primero en sentido
ascendente y después descendente. Hacían el collar con el número de perlas
indicado y lo colgaban en su perchita correspondiente.
*Hemos repasado colores, formando collares
con el que les indicaba la percha de la regla.
*Hemos repasado formas geométricas y
"el tachado" como ellos lo llaman. Aquí veis un ejemplo: Un collar de
cuadrados y otro de perlas que no sean cuadrados.
*Otra modalidad ha sido indicar varias
características o atributos. Ejemplo: Un collar de círculos grandes y rojos.
*Cuando estábamos trabajando los tamaños,
surgió la posibilidad de formas series: Rojo grande- rojo pequeño,
verde-amarillo... y cada vez les iba gustando más.
A medida que íbamos jugando, me iba dando
cuenta de las infinitas posibilidades que nos iba a dar este juego. Así que les
planteé un reto.
Ahora yo os muestro un collar y me tenéis que
decir, cuáles son las instrucciones que nos habría dado la princesa Vanesa para
hacerlo. Aquí os enseño una foto de lo que hicieron.
Fue genial, así que las próximas veces que
juguemos, ya haremos collares indicando varios atributos. Seguro que seguirán
surgiendo más posibilidades.
La verdad es que cuando empecé a elaborar
este juego no sabía lo que iba a dar de sí. Ha sido increíble comprobar la
funcionalidad que tiene y lo que disfrutan cada vez que juegan con la princesa.
Nosotros estamos convencidos de que hemos
ayudado mucho a nuestra amiga y que sus papás y ella estarán realmente
contentos.
También hemos aprendido lo importante que
es decir siempre la verdad y hacerle caso a nuestra familia. Y otra cosa muy
importante, lo bueno que es el trabajo en equipo para buscar soluciones y
conseguir buenos resultados. Entre todos, hemos logrado resolver el problema y
ayudar a los demás.
¿Qué pensáis vosotros?
Esperamos que os guste mucho y os sea de ayuda.