Tal y como os dijimos en
la entrada anterior, el día que hicimos el Taller del Alfarero, elaboramos unas
figuras que nos servirían para hacer algo muy especial. Decidimos que este año,
íbamos a decorar el árbol de Navidad de la clase con nuestras creaciones.
Aquí están.
Se quedaron muy bonitas, pero necesitan un
toque especial de brillo y color para convertirse en unos auténticos adornos
navideños. Así que mirad lo que nos preparó la seño.
No nos faltaba de nada. Cogimos un pincel
y..... ¡a pintar!
Pintamos con una mezcla de pintura de
color y cola blanca. Una vez pintadas todas las figuras, les dimos el último
toque de brillo....¡purpurinaaa! y así de chulas se quedaron todas nuestras
figuritas.
Ya sólo nos quedaba esperar hasta que todo
estuviera bien seco. En cuanto vimos que ya podíamos tocarlas sin problema,
decoramos el árbol de Navidad y mirad qué bonito se quedó.
Pero aún quedaba lo mejor por llegar. Y es
que este año, no haríamos tarjeta navideña; nuestra felicitación de Navidad
sería algo mucho más especial.
El
último día de cole, antes de que llegaran las vacaciones de Navidad, hicimos
paquetitos de regalo con las figuras. Envolvimos tres en papel celofán y las
atamos con un bonito lazo. Cuando nuestras familias vinieron a por nosotros
para irnos a casa, les dimos este regalito tan especial y así, nosotros
seguiríamos disfrutando de estas creaciones en nuestra casita. No tenemos fotos
de este momento, pero os podemos asegurar que hicimos muy muy felices a
nuestras familias. Fue una idea fantástica y así nos convertimos en unos
auténticos "Alfareros del
Corazón".
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